Una Auditoría Energética es un estudio energético teórico/práctico para locales comerciales o industriales.
Además el Real Decreto 56/2016, por el que se transpone la Directiva Europea 2012/27/UE obliga a todas las empresas, independientemente del sector de actividad, que al menos durante dos ejercicios consecutivos cumplan con la condición de gran empresa a la realización de una Auditoría Energética.
En la Auditoría Energética se analizarán teórica y prácticamente los consumos energéticos de los locales comerciales y las empresas, se propondrán unas medidas de mejora a realizar que, una vez implantadas, conseguirán un ahorro en costes energéticos, mejoras en la eficiencia y la productividad, además del consiguiente beneficio medioambiental.
Las auditorías energéticas persiguen un triple objetivo:
1.- Adecuar los consumos reales a los consumos nominales, garantizando un buen mantenimiento de las instalaciones.
2.- Reducir los consumos nominales con nuevas tecnologías que aumenten la eficiencia del consumo energético.
3.-Minimizar la demanda del proceso optimizando la operación de los servicios energéticos.
Consta de dos partes:
1.- Estudio de la situación actual del local o la empresa, con análisis de flujos energéticos, costes y usos.
2.- Identificación de las áreas, equipos o instalaciones susceptibles de mejora con una lista de posibles medidas a aplicar, incluyendo el período de retorno.
Al igual que en el Estudio de Evaluación Energética, se propondrá un cronograma de actuación de las medidas, para que las inversiones a realizar en las medidas de mejora provengan principalmente de recursos propios o ahorros de las medidas ya implantadas.